Este es un checklist para orientarte en la evaluación del ambiente de control y la integridad de la empresa. 

Conoce al auditor interno. Pídele que te explique cómo está organizada el área, si cuenta con un plan anual de auditoría interna, como está conformado el comité de auditoría, y cuándo y cómo se reportan los avances del plan al directorio. ¿Es capaz de actuar con independencia? ¿cómo es su relación con el CEO?

Entiende la matriz de riesgos. Reúnete con el gerente de Riesgos o la persona encargada para conocer el alcance del sistema de control y el modelo de prevención. Haz un viaje por la matriz de riesgos con él. ¿Cuáles son los riesgos más probables y de mayor impacto?  Averigua que certificaciones ISO y/o anticorrupción están vigentes.

Ten una conversación “cara a cara” con los principales ejecutivos. Escucha lo que te cuentan acerca de su trayectoria en la empresa, el área que lideran, sus principales logros y preocupaciones. ¿Qué valores de la cultura captas en sus historias? ¿cuál es su nivel de engagement (trust) en la empresa? La solidez de los valores y un clima de confianza son fundamentales para que el sistema de control, el modelo de prevención y las certificaciones no sean letra muerta.

Identifícate como director de la empresa en tu perfil y síguela en las redes. Seguramente te llegaran mensajes de clientes con “problemas”. ¿Cómo maneja la empresa los incidentes? En las redes, están las publicaciones de la empresa, noticias, reportajes y comentarios asociados a ellas. Que sea tu termómetro para evaluar el riesgo reputacional.

Presta atención a la conversación informal. En las sesiones de directorio y fuera de ellas, escucha lo que está detrás de los comentarios, las anécdotas e incluso las bromas. En este llamado “lenguaje oculto” están las señales de cómo se enfrentan los dilemas legales, éticos y morales. Con el tiempo, atrévete a ser tú quien traiga a la superficie los sesgos inconscientes que necesitan ser abiertamente trabajados.

La integridad empresarial se ve reflejada en la conducta de la empresa y el comportamiento de los colaboradores. Se preserva con un sistema de control compuesto por códigos, procesos y certificaciones, asentado en la cultura y valores organizacionales. Se pone a prueba todos los días, pero especialmente cuando la empresa atraviesa dificultades y/o enfrenta dilemas legales, éticos y morales. En esos momentos, es el directorio, al cual ahora perteneces, el que define el tone at the top que la fortalece o la destruye. 

Artículo publicado en Gestion el 1 de Diciembre de 2023